Esta inspiración se encuentra en la belleza de lo asimétrico y lo impredecible.
Cada pieza abraza la imperfección como un lenguaje estético que invita a la contemplación, a encontrar la serenidad en la simpleza y el equilibrio en la neutralidad.
A través de texturas orgánicas, tonos suaves y composiciones espontáneas, creando espacios que respiren calma, autenticidad y una conexión silenciosa con el paso del tiempo inspirándose en la filosofía wabi-sabi..